Introducción
Fuente: Nel Riott
Este artículo tiene como objetivo explicar quien es Seidr/Heiðr dentro de la cultura nórdica. Una diosa muy poco conocida, la cual veneramos dentro de mi grupo como Seidr, diosa de la magia, quien en textos ha aparecido con diferentes nombres. También quiero proporcionar un análisis sobre Güllveig, quien es dentro de la cultura y su relación con Heidr y la volva del poema Voluspa (que es la misma persona/ente/diosa).
Incluso propongo un análisis comparativo de Heidr, Freya y diferente culturas que cuentan con diosas de la fertilidad, amor y la magia.
El objetivo es exponer que los nórdicos tenían una diosa de la magia, la cual no es Freya, sino, una muy diferente y mucho más poderosa pero por esa razón y cuestiones de contexto histórico ha desaparecido (o la hicieron desaparecer).
¿Por qué empecé con este artículo? Llevo en el paganismo más de 2 años y me dediqué a esto con demasiada seriedad. Mi guía me habló de seidr, la diosa del norte la cual se veneraba entre las völur, yo no encontraba datos sobre ella. Hoy en día enseño, sigo aprendiendo y soy guía. Ambiciosa de conocimiento me hice muchas preguntas que me dispuse a responderlas por mi cuenta pero con confirmación de mi guía y de textos académicos. Aunque este escrito es para mi, decido compartirlo para que más mujeres que quieren seguir este camino tengan una base, y hacer más conocida a la diosa que vengo venerando desde hace más de 3 años, Seidr/Heidr. Me arriesgo a decir que es un acto de justicia, ya que siendo una de las diosas más poderosa fue subestimada y no tomada en cuenta dentro del panteón de muchos grupos.
En tierras nórdicas hubo mujeres poderosas a las cuales se les llamaban völur. En una búsqueda rápida podemos leer que "völva" significa, mujer sabia, vidente, sacerdotisa. Eran las mujeres que tenían conocimientos sobre brujería, plantas, poderes ocultos y tenían grupos de mujeres donde esparcieron sus saberes. Eran muy bien recibidas e incluso podemos leer en la saga de Erik el rojo que ellas tomaban una posición de autoridad incluso más alta que la de un rey. Eran muy valoradas, sus saberes eran necesarios y muy solicitados. No es descabellado pensar que cuando la empezó expansión del cristianismo (una institución que prefería a las mujeres en una posición sumisa) borraron todo registro de la diosa que guiaba a estas völur, una divinidad que incluso era más poderosa que los mismo dioses (eso veremos más adelante).
Como prueba del poder de estas mujeres, tenemos los textos de Tácito: Incluso suponen que algo de santidad y presciencia es inherente al sexo femenino; y por lo tanto, no desprecian sus consejos ni ignoran sus respuestas. Hemos visto, en el reinado de Vespasiano, Veleda, venerado por muchos como una deidad. (Germania : 8).
Las brujas nórdicas desempeñan una función crucial dentro de la religión, rituales, y temas espirituales.
Heiðr
Esta diosa aparece por primera vez en el Völuspa, también es nombrada como Güllveig.
Recuerdo la primera gran guerra en el mundo,
cuando estaban borrachos de oro perforaron con lanzas,
y en el salón de Hár la quemaron;
tres veces la quemaron tres veces renacida,
a menudo, no rara vez, pero aún vive.
Heiðr la llamaban allí donde iba,
la sabia adivina, hacía conjuros,
hacía magia siempre, hacía magia en trance,
era siempre el deleite de las mujeres viles.
Völuspá: 21
Se dice que ella vino como emisaria de los Vanir. También se dice que tenía una debilidad por el oro y por eso los dioses decidieron matarla. Pero difiero un poco de esa idea. En esas pocas frases podemos darnos cuenta que era una diosa, la cual no podía ser asesinada ya que volvía a resucitar. Es evidente que está ligada a la magia, incluso se menciona que hace conjuros y es adivina, algo que no se menciona con respecto a Freya, a quien se la vincula con la práctica de Seidr, y con el hecho de ser la misma diosa que quemaron en el salón de Hár.
Hay una conocida teoría que dice que Güllveig (Heiðr) es Freya, solo por el hecho en que la diosa del amor es mencionada con la vinculación de Seidr, y ahí me formulé una pregunta:
¿Por qué se haría asesinar y luego iría llorando a su padre (Njördhr) y así comenzar la guerra? ¿Por qué luego de que la atravesaron con lanzas y la quemaran tres veces ella aun así le enseñaría Seidr a los dioses Aesir? Son preguntas lógicas que cualquiera puede hacerse al leer el Voluspa.
Etimología
Siguiendo esta idea analizaré la etimología de los nombres (Heiðr y Güllveig) para llegar a una conclusión en esta instancia.
Esa diosa primero es mencionada como Güllveig, y la raíz de esta palabra es Gull- que significa oro, y el nombre puede traducirse de diferentes formas relacionado con ese metal: "rama de oro", "bebedora de oro". Luego de los tres intentos de matarla los dioses la llaman "Heiðr", en nórdico antiguo se escribe Heiðr, y se traduce como "brillante", "reluciente", y se utiliza en sustantivo, "honor". Una palabra que denota prestigio, y se relaciona con la riqueza.
Analizando la transformación de estos dos nombres (como se presenta a la diosa con el nombre Güllveig), nos damos cuenta que en primer instancia la ven como alguien avara, con hambre de oro. Antiguamente, en los pueblos germánicos juzgaban la riqueza, y tenían el pensamiento de que la avaricia es mala, aun así es un símbolo de estatus social, así que esto nos puede decir que era poderosa no solo por su magia e inmortalidad, sino que tenía riquezas, dando reputación a su persona.
Es evidente que Heiðr era una diosa poderosa que amenazaba a las fuerzas divinas incluso de los dos panteones, y esto también se reflejó en el arquetipo de la bruja conocedora y sabia que fue quemada en las hogueras. Con esto y el hecho su sobrada demostración de inmortalidad y magia, podemos deducir que fue desterrada ya que no se la menciona nunca más pero es inmortal, aunque sí es mencionada en algunas sagas con otro nombre. Esto nos muestra esa visión que tenemos de la völva que pasa de pueblo en pueblo o solitaria, que otorga sus servicios de vidente. También nos muestra la marginalidad de la bruja sabia, y con gran poder que puede hacerse temer y respetar incluso por los reyes.
Luego de las demostraciones la llaman Heiðr, que entre sus significados es "reluciente" y "brillante", y el sinónimo "honor". Esto nos puede decir que esta diosa daba luz, conocimiento, así como la diosa Hécate (diosa Griega de la magia) que lleva sus antorchas para guiar, lo mismo hace Heiðr con sus seguidoras. La imagen que nos queda es la de una figura radiante que se eleva de las llamas, riéndose de la tontería de los hombres que piensan que su poder y su sabiduría pueden ser destruidos. Como tal, ella es un poderoso modelo a seguir y una fuente de fortaleza cuando salimos del armario de las escobas y afirmamos nuestro derecho a practicar la antigua magia y la adoración como nos plazca .
Siguiendo con este arduo trabajo etimológico, tenemos la última frase de la estrofa 22 del Völuspá: "era siempre el deleite de las mujeres viles". ¿Trataba Snorri Sturlusson de hacer un guiño a la Iglesia, acabando la descripción de una hechicera con una frase despectiva? ¿O acaso era una mala traducción?.
Tanto la mujer sabia errante como la mujer mágica que es atrapada y quemada son parte del arquetipo de la bruja. En la próxima estrofa, se resumen sus actividades mágicas.
Héiði hana hétu hvars til húsa kom,
völu velspáa, vitti hon ganda;
seið hon, hvars hon kunni, seið hon hug leikinn,
æ var hon angan illrar brúðar.En ese momento, cuando llegó a las casas de los hombres, vio
a Völva, sabia en la magia [magia],
mucho seidhr que conocía, seidhr por alucinante,
siempre fue la alegría de las mujeres malvadas ["novias"]
"Illrar brúðar" no significa "mujeres viles". "Brúðar" se podría traducir como "novias", por otro lado "illrar", sí se podría traducir como “viles”, aunque tal vez sería más correcto tomar la acepción “malignas” o “perjudiciales”. Si tomamos una posición etenista se podría hablar de unas mujeres con una serie de compromisos adquiridos similares al matrimonio (es decir, que han superado un rito de paso, en este caso una formación mágica), y que tienen capacidad para hacer maldades, es decir, que son poderosas.
Exponiendo otros puntos de vista para la etimología del nombre de esta diosa, Diana L. Paxson nos muestran dos interpretaciones interesantes para la traducción, las cuales estoy muy de acuerdo. Primero, dice que "Heidh" se refiere al brillo del cielo, o resplandor de los cielos, y que nos remite a la tendencia indoeuropea de definir a los dioses como seres brillantes. El segundo significado que nos muestra es sobre "heide" en alemán, significa páramo o pago (campo), y también es la raíz de la palabra "pagano" (heathen). El páramo, campo es el lugar al que la seiðkona , y más tarde cualquiera que quisiera adorar a la antigua usanza, se retiraba para hacer su magia.
Heiðr en otros textos
Heide (Seiðr, Heiðr, Heid, Hed, Heith, Hetha, usaremos algunos de esos nombres en este texto) es el nombre con el que se llama Güllveig/Heiðr cuando deambula por el mundo lanzando hechizos y profetizando. Este nombre también se puede usar como un término genérico para las mujeres que practican magia. Por ejemplo, en la "Corta Profecía de la vidente" aprendemos que: "Heidhr está bien, Hrossdhjófr Hrimnis kindar" (Heide y ladrón de caballo (son) los parientes de Hrimnir). Aquí el nombre Heide generalmente es dado como "bruja" por los traductores. Hrimnir es uno de los gigantes. El significado del pasaje es probablemente que las brujas y los ladrones de caballos, quienes actúan fuera de la ley de la comunidad, son parientes de los Gigantes, los poderes que gobiernan el desierto .
Este nombre también aparece en textos como una practicante de magia: La völva que profetiza para el rey Frodi en la Saga Kraka de Hrolf se llama Heith. En la saga de Frithiof, uno de las seiðkona que levanta una tormenta contra Frithiof se llama Heide. El nombre de su hermana, Hamglam, posiblemente esté relacionado con hamhlypunni (saltadores de piel), ya que los dos salen de sus cuerpos para hacer su magia.
Una famosa homónima tiene un papel importante en Örvar Odds saga: "Había una völva llamada Heidr que podía prever el futuro, así que con su sabiduría mágica ella sabía todas las cosas antes de que ocurrieran. Iba a los banquetes. diciendo a la gente su destino y haciendo las previsiones del tiempo para el siguiente invierno. Solía tener un cortejo de quince muchachas y quince muchachos [...] Asmundr invitó a la hechicera al banquete; ella aceptó y llegó con todo su cortejo. Ingjaldr fue a darle la bienvenida y la invitó a que entrara en la sala principal. Luego prepararon las cosas para los hechizos de la noche siguiente. Después de la cena, la gente se fue a dormir, pero la profetisa y sus compañeros fueron a cumplir sus rituales nocturnos. En la mañana Ingjaldr fue a verla y le preguntó el resultado de sus hechizos.
'Creo que descubrí todo lo que quieren saber' [...] Le dijo a cada uno de ellos lo que el futuro le reservaba y todos ellos quedaron satisfechos con lo que les esperaba. Entonces hizo las previsiones del tiempo para el próximo invierno y para muchas cosas antes desconocidas".
Landnámabók cuenta la siguiente anécdota acerca de un hombre llamado Ingimundr y de sus dos amigos: "La völva Heidr profetizó que los tres se asentarían en una tierra entonces no descubierta, al oeste en el océano. Ingimundr dijo que se aseguraría que tal cosa no fuera nunca a pasar. La völva le dijo que no podría evitarlo y como prueba le dijo que algo había desaparecido de su bolsa y que no lo encontraría hasta que no empezara a escarbar para el pilar de su asiento en la nueva tierra [se dejaban ir a merced de las olas en vista de la tierra donde se quería establecer la nueva casa y cerca del punto donde las corrientes las habían empujado hacía la ribera, allá se construía]. Más tarde, Ingimundr "mandó a los lapones (Finnar) en una cabalgadura mágica hacia Islandia para encontrar al objeto que había perdido. Era una imagen de Frey hecha de plata. Los lapones regresaron -habían encontrado la imagen, pero no pudieron recuperarla- y dijeron a Ingimundr que se encontraba en un cierto valle entre dos colinas. Le describieron detalladamente donde estaba situada esa tierra y donde tendría que establecer su casa".
Otras profetisas de nombre Heiðr aparecen en Hrólfs saga Kraka y Friðthjófs saga. Según una leyenda, la madre adoptiva del rey Haraldr hárfagri, que también se llamaba Heiðr, era una hechicera que vivía cerca del Mar Blanco.
Heide expresa mejor la imagen de la mujer mayor vigorosa, o la anciana que vive al margen de la sociedad. Las diosas (como los dioses) son polimórficas y pueden aparecer en cualquier forma que se adapte a la ocasión. Esto incluye la edad aparente. Una diosa, cuando asume un papel que generalmente desempeña una mujer de una edad determinada en la cultura, probablemente parecerá tener esa edad. Sin duda, el trabajo de la magia se asoció con mujeres mayores en la tradición germánica porque lleva tiempo dominar la tradición, y también porque las mujeres más jóvenes están demasiado ocupadas con el hogar y la maternidad. En las sagas, las mujeres que hacen magia son casi siempre maduras, si no avanzadas en años.
Sin embargo, aún pueden ser sexualmente activos, incluso si sus hijos son adultos. Toman amantes para su propio placer, no para la procreación.
Freya no es Güllveig/Heiðr
Como expuse anteriormente, no tiene sentido en que Freya sea la artífice de la guerra entre los Aesir y Vanir, y luego le enseñara magia a este primer grupo de dioses luego de que ellos la hayan quemado tres veces. Por otro lado, es posible el significado del nombre de Güllveig anteriormente dicho (Gull- significa oro) fuera una de las cosas por las cuales se relaciona esta diosa con la divinidad del amor y la fertilidad.
Otra relación es el hecho de que tiene conocimientos de Seidr, y ese hecho fue suficiente para que los paganos de hoy en día asuman que eran la misma diosa cuando en muchos textos dice que solo es una teoría, la cual no tiene fundamentos pues en ningún otro momento se menciona a Freya con el nombre de Güllveig o Heid.
La próxima explicación, la cual es un poco más personal y de experiencia, es el percatarme del patrón que tienen algunas diosas en las otras culturas, la cual desarrollaré más adelante en este mismo artículo pero que mencionaré ahora. Leyendo y nutriéndome con datos, me percaté que en muchas culturas la diosa del amor suele ser también de la fertilidad, y es una diosa totalmente a la de la magia, y que en muchas culturas tienen una divinidad especial para representar a sus videntes y la hechicería.
La última razón que diré sobre esta afirmación es sobre una característica muy conocida de Freya, la cual es su carro tirado por gatos. Estos felinos son sagrados para esta diosa, así como los cuervos y lobos lo son para Odín. Si asumimos que ella era la diosa de la magia, también debemos asumir que era la diosa predilecta de sus seguidoras practicantes de Seidr: las völur, pero si vamos a la descripción sobre la vidente Þorbjörg Lítilvölva en la saga de Erik el rojo, podemos leer: "Llevaba botas de piel de becerro forradas de piel, con cordones largos y resistentes y grandes perillas de peltre en los extremos. En sus manos llevaba guantes de piel de gato, blancos y forrados de piel". ¿Por qué sus seguidoras tendrían piel de un animal sagrado para la diosa? No es un animal representativo, sino que son protegidos por la diosa de la fertilidad, no podría perdonar que sus seguidoras usaran unos simples guantes con pieles de gatos.
La profecía de la völva
Völuspa (La profecía de la volva, o la profecía de la sibila), es un poema medieval islandés, presentado en las Eddas, una obra que recopila mitos paganos nórdicos, escrito por Snorri Sturluson quien trató de juntar relatos antiguos, lo más fiel posible.
Este poema se presenta en forma de un monólogo pronunciado por una völva (vidente). En principio tenemos pocos datos sobre esta volva a quien Odín acude para que le relate sobre el destino del cosmos, pero la vidente tiene una personalidad fuerte, desafía a Odín con sus dichos y actúa como si ya conociera al dios, además su forma de relatar es peculiar, pues describe los hechos como si hubiera estado allí desde el principio y con cierto toque de "inmortalidad". ¿Es posible que esta völva sea Heidr? Recordemos que esta diosa práctica Seidr, y a pesar de que Odín tiene conocimientos en esa práctica, no lo usa pues no es su campo y necesita recurrir a una especialista: La diosa de la magia. Heidr (la vidente en este poema si asumimos que es ella) relata todo con mucho detalle, de una manera pictórica y con imágenes muy descriptibles. Su forma de hablar hacia el padre de todos nos hace darnos cuenta de que se conocían, y la actitud autoritaria y poderosa de la völva nos hace pensar que está a la altura de el, como igual a igual, también la vemos hablar refiriéndose a ella misma en primera o en tercera persona, ella describe varias veces lo que ella recuerda, ve (vio), o sabe: este último verbo se reserva para los aspectos más cercanos de su sabiduría. Para analizar mejor el poema, desglosé sección por sección basándose en el texto y análisis de Hermann Pálsson.
I. Prólogo. Introducción del poema. La völva pide atención dirigiéndose a todos los dioses y a la humanidad y luego se dirige a Odín, recordando los acontecimientos más antiguo que puede recordar como si hubiera estado allí.
II. Caos. La völva recuerda a los gigante, que aunque nacieron en un pasado muy remoto, fueron los que la criaron; recuerda también los nueve mundos, las nueve gigantas y el glorioso árbol del destino debajo de la tierra. Al principio no había nada, ni arena, ni mar, ni olas; no se podía ver ni tierra, ni cielo arriba ni hierba por algún lado: solo un inmenso vacío.
III. Creación. Todo cambió cuando los hijos de Burr levantaron las tierras y crearon Miðgard. Los astros no sabían donde era su casa, las estrellas no sabían qué lugar les pertenecía. En este punto se encuentra el primer refrán: "Entonces todas las potencias divinas, los sagrados dioses, se sentaron en sus escaños para deliberar". Dieron nombre a la noche y a la luna menguante, a la mañana y al mediodía, tarde y noche, y decidieron cómo calcular el tiempo en años. Las siguientes dos estrofas describen la época de oro de los dioses: se reunieron en Iðavöllr y erigieron altos templos de madera y santuarios, construyeron forjas y crearon riqueza, hicieron tenazas y otros instrumentos. Jugaban damas en los jardines y se entretenían. No les faltaba el oro, hasta que tres horribles "doncellas" de los gigantes llegaron de Jötunheimr, la "Tierra de los Gigantes". La identidad de estas intrusas indeseadas es uno de los varios misterios del poema: su llegada constituye el primer presagio siniestro. El refrán antes mencionado se repite en la estrofa nueva, antes de que los dioses decidan crear la raza de los enanos, y sirve para señalar su importancia en el orden cósmico el hecho de que 64 de ellos sean mencionados por su nombre. Al final se realiza la creación del hombre; tres dioses poderosos y benignos llegaron a cierta casa, donde encontraron a Askr y Embla en el suelo, débiles y sin destino. No tenían aliento, ni espíritu, ni sangre, ni voz, ni tez bonita. Odín les dio aliento, Hoenir espíritu, Lóðurr sangre y tez bonita.
IV. Destino. Después de haber completado el relato de la creación, la völva dedica dos estrofas (19-20) al tema cabal del hado: "Conozco una haya llamada Yggdrasil, un árbol alto rociado de arcilla blanca. De allí viene el rocío que cae por los valles. Se yergue siempre verde sobre la fuente del destino. De aquel lugar vienen tres vírgenes sabias, del lago que yace a los pies de abeto. Llamaban a una Urdð, a la segunda Verðandi y a la tercera Skuld. Ellas crearon leyes, escogieron la vida de los hombres y les dieron destino". Luego la sibila recuerda la primera guerra del mundo, cuando atacaron a Güllveig con lanzas y la quemaron hasta morir en la mansión de Hár: tres veces la quemaron, tres veces ella nació, una y otra vez, y aún está viva. La siguiente estrofa (22) parece referirse a la völva misma; será considerada más adelante.
V. Hostilidades. (23-35). Los dioses se reúnen a decidir si deberían sufrir una pérdida tan grande o pedir compensación. Están en guerra: Odín lanza su lanza al centro de la batalla, la primera batalla en el mundo. La fortaleza de los Æsir está en ruinas. Los Vanir acuden el campo de batalla con sus conjuros de guerra. El refrán se repite ahora por última vez, mientras los dioses se reúnen para decidir quien había llenado el aire de perfidia o prometido la esposa de Óðr a la raza de los gigantes . Solamente Thor siguió peleando, lleno de ira, raramente se queda inactivo al oír tales noticias. Se rompieron juramentos, promesas y votos solemnes que se habían intercambiado. Ella (la völva) sabe que el oído de Heimdall está escondido debajo del alto árbol sagrado. Ella ve un río chorrear desde la promesa de Valföðr (el ojo de Odín), regando aguas lodosas sobre sí mismo.
Ella estaba sentada afuera sola cuando el viejo temeroso por la suerte de los Æsir llegó y la miró fijo a los ojos. ¿Quieres saber de mi? ¿Por qué me pones a prueba? Yo lo sé todo, Odín, que escondiste tu ojo en la renombrada fuente de Mimir, que bebe hidromiel todos los días desde la "promesa de Odín". El padre del ejército (Odín) le dio pulseras y collares a la sibila, a cambio de los cuales ella pronunció sabias palabras y profecías mágicas.
Haciendo paréntesis en el desglose de este poema, aquí vemos como la sibila prueba a Odín y de forma altanera hace entender que ella lo sabe todo. Odín le da pulseras y collares, que si pensamos que ella es Güllveig/Heidr, es una forma de compensación, y recompensa por los saberes ahora expuestos.
La völva vio a las valquirias llegar de partes lejanas, vio la muerte reservada a Baldr, el dios manchado de sangre, hijo de Odín. El muérdago entre los arboles, alto sobre la llanura. Esta planta, en apariencia tan delicada, se volvió un proyectil portador de desgracia. Höðr lo lanzó; Vali, el hermano de Baldr, hijo de Odín, tenía apenas un día de edad. Nunca se lavó las manos, ni se peinó antes de haber conducido al enemigo de Baldr a la pira funeraria. Frigg lloró en Fensalir por el dolor. Ella (la völva) vio un prisionero que yacía a los pies de Hveralundr, mucho se parecía al engañoso Loki. Allá está sentada Sigyn, no muy alegre, cerca de su marido.
VI. Presagios. (36-49). La muerte de Baldr constituye el clímax de la sección IV, que termina con el castigo del traidor Loki, el verdadero responsable del trágico hecho. Ahora la völva evoca imágenes premonitorias, una tras otra, que anuncian todas el Ragnarok, "el destino de los dioses", la culminación de todo el poema.
En la estrofa 44 se encuentra el tercer refrán por primera vez y se repite luego en las estrofas 49, 54 y 58: "Garmr aúlla furiosamente frente a Gnípahellir; la cadena se romperá y el lobo correrá libre. Ella (la völva) conoce muchos hechizos; puedo ver más allá en el futuro el poderoso destino de los dioses de la victoria". Habrá tiempos difíciles en la tierra y mucha prostitución; una edad del hacha, una edad de la espada - escudos serán partidos - una edad de la tormenta, una edad del lobo antes de que el mundo se colapse. Ningún hombre salvará a otro. Los hijos de Mímir andan libres por el mundo. La destrucción se anuncia con el agudo fragor del cuerno Gjallarhorn; Heimdall sopla fuerte, mantiene alto su cuerno. Odín consulta la cabeza de Mimir. La haya Yggdrasil tiembla, pero aún permanece de pie. El árbol antiguo se queja y el gigante es desatado.
VII. Ragnarök. (50-58). [...] El sol se vuelve negro; la tierra se hunde en el mar; las estrellas brillantes desaparecen del cielo. El fuego brama contra aquel que da la vida (el sol); un fuerte calor quema el mismo cielo. "Garmr aúlla furiosamente frente a Gnípahellir; la cadena se romperá y el lobo correrá libre. Ella (la völva) conoce muchos hechizos; puedo ver más allá en el futuro- el poderoso destino de los dioses de la victoria".
VIII. Renacimiento. (59-64). La völva ve la tierra, fresca y verde, reemerger del mar. Cascadas caerán y un águila, aquella que agarra los peces, volará arriba de las montañas. Los Æsir se reúnen en Iðavöllr y discuten sobre la serpiente poderosa; recuerdan hechos importantes y las antiguas runas de Fimbultyr (Odín); en el pasto encontrarán de nuevo las maravillosas piezas doradas del juego que les pertenecía en el principio del tiempo. Los campos darán cosechas sin sembrar y todo el dolor será aliviado cuando regrese Baldr. Baldr y Höðr vivirán juntos en las ruinas del palacio de la victoria de Hroptr, el santuario del dios de la guerra.
Ella (la völva) ve un palacio más resplandeciente que el sol, con un techo de oro, irguiéndose sobre Gimlé. Allá la gente virtuosa vivirá y será feliz hasta el fin del tiempo.
IX. Epílogo. Entonces vendrá volando el oscuro dragón, la serpiente reluciente desde Niðafjöll. Niðhögg vuela sobre las llanuras, llevando cadáveres consigo. Con el renacimiento de un nuevo mundo se indica el comienzo de un nuevo ciclo; los dioses viven otra edad de oro, pero la sombra que deja el dragón siniestro sugiere la llegada de los tiempos infelices. El poema termina con la desaparición de la völva misma: "Ahora ella se hundirá".
A continuación analizaré partes destacables para reforzar mi punto, los cuales Pálsson analizó, aunque le dio otro enfoque, yo resaltaré lo que me parece importante para fundamentar mi idea.
1. La forma en que la völva relata el poema. El Völuspa consiste de fragmentos tomados de las visiones, recuerdos y los conocimientos de la vidente. Cuenta una historia de principio a fin. Su relación única con Odín, el dios supremo y uno de los tres divinos creadores del mundo y de la humanidad, hace de la völva el mitógrafo ideal. La völva (a diferencia de otros textos narrados) usa un método más parecido a las artes visuales que a la técnica narrativa. Ella evoca imágenes mitológicas una tras otra, sin preocuparse de explicar vínculos causales entre ellas. Las escenas míticas en el poema siguen, supuestamente, un orden cronológico y la völva espera evidentemente que su público siga el hilo.
2. Pálsson opina en su análisis que la narradora del texto es una völva quien practicando hechizos comenzó a relatar en trance el poema sobre el inicio y final de los tiempos. Dentro del poema se hacen alusión a otros los cuales la völva asume que su público ya sabe. Ella es sabia, selecciona prudentemente sus palabras y habla con Odín, pero ¿es posible que la diosa Heidr la hubiera usado para transmitir sus recuerdos? No sería descabellado pensarlo, pues las völur tenían una gran conexión con esta diosa, y siguiendo con el punto del vívido relato, es posible que la völva haya estado en su grupo selecto transmitiendo lo que la diosa le hubiera dicho para que las demás völur puedan relatarlo.
3. Hay quienes teorizan que Güllveig es una giganta, o que vive a los márgenes de la sociedad entre dioses, gigantes y hombres. Con su otro nombre, Heidr, se la nombra en Hyndluljóð (32), como hija del gigante Hrímnir. En el poema, la völva afirma en la segunda estrofa que ella recuerda a los gigantes que la criaron. Los Jötnar supuestamente habían existido desde el principio de los tiempos, mucho antes de la creación del mundo, así como también esta völva hace parecer inmortal con su relato.
4. Relato en tercera persona. En la estrofa 22 se menciona a ella misma (Heidr/Güllveig) en tercera persona: "Llamaban a Heidr cuando venían a visitar una casa, la völva profética”. Ella practicaba hechizos mágicos y brujería donde podía; practicaba magia en estado de trance. La "novia maligna la quería mucho" (más arriba está el análisis de la etimología de esta estrofa). Aquí se nos da un ejemplo de una völva itinerante que ofrecía sus servicios a aquellos que querían saber algunos secretos, incluyendo los misterios del futuro. Las sagas mencionan a varias otras sibilas parecidas.
El autorretrato de la völva en Voluspa (estrofa 22 y 28) refuerza la impresión que ella tiene una relación especial con Odín. Aunque es sutil, se puede ver una posible conexión entre Güllveig/Heidr y la völva que relata el Voluspa, que bien podría ser la diosa de la magia hablando con Odín.
Paralelismo con otras culturas
Haciendo mi investigación, una de las cosas que pude darme cuenta es de un patrón que se repite en bastantes culturas ya sea lejanas o ajenas a la cultura nórdica, o incluso las más cercanas: en todas ellas hay una diosa de la magia, esta diosa es mujer, y por último, es diferente a la diosa/dios de la fertilidad que haya en esa cultura.
A menudo relleno los baches en la historia de Heidr/Seidr con los datos de la diosa Hécate, pues son muy parecidas y entre sí tienen cosas similares, tanto en sus historias como en funciones.
• Mitología Griega
En esta cultura tenemos a Hécate. Diosa griega asociada con los caminos, luz, magia, brujería, fantasmas y hechicería. Fue una de las principales deidades adoradas en los hogares atenienses como diosa protectora y que otorgó prosperidad y bendiciones diarias a la familia.
Como pienso quedarme con las similitudes, excluiré las diferencias (que son muy pocas). Antes ya vimos que Heidr fue llamada Güllveig, y entre sus nombres se encontraba "brillante" o "reluciente", también fue asociada al fuego iluminador, comparado con la diosa griega quien entre sus epítetos tiene el nombre de Phosphoros (la que trae luz) o Crateis (poderosa), incluso llevaba dos antorchas para iluminar el camino.
El número tres se repite mucho relacionado con la diosa Hécate quien era representada con tres cabezas representado tres fases lunares, o tres momentos de la vida (niñez, adultez, vejez). Heidr fue quemada tres veces, y renació tres veces.
Aunque Odín no le dio grandes regalos a Heidr (algunas joyas por sus profecías en el Völuspa), podemos ver que tenían una relación parecida a la de Zeus y Hécate, pues se trataban como iguales, y Zeus la honró sobre todos y le procuró espléndidos regalos, la suerte de participar en la tierra y el mar estéril. Ella también obtuvo en lote la dignidad que confiere el estrellado cielo y es especialmente respetada por los dioses inmortales .
Otra de las características similares de estas dos diosas es su origen. Se dice que Hécate era hija de titanes, hija de Asteria, una diosa de las estrellas hermana de Leto, a su vez madre de Artemisa y Apolo. La abuela de estos tres primos era Febe, la anciana titánide que personificaba la luna. Hécate era una reaparición de Febe, y por tanto diosa lunar, que se manifestaba en la oscuridad de la luna. El paralelo de los titanes en la mitología nórdica eran los Jötnar (gigantes de hielo) quienes vimos anteriormente, pueden ser quienes criaron a Heidr.
También Hesíodo nos dice que "Hécate era una reaparición de Febe", Phœbē: ʻbrilloʼ del intelecto, titánide que tenía como epíteto "la de la corona de oro" (así como Güllveig tiene en su nombre "rama de oro" o "brillante").
En la mitología griega tenemos la diosa Artemisa quien es la diosa helena de los animales salvajes, el terreno virgen, los nacimientos, la virginidad y las doncellas, que traía y aliviaba las enfermedades de las mujeres. Hermana gemela de Apolo (dios del sol). Su paralelo nórdico sería Freya quien también se la conoce como diosa de los partos, y tiene un hermano gemelo llamado Frey (también dios que representa la luz solar). Aun así, Freya se relaciona más con Afrodita por ser la diosa de la belleza, la sensualidad y el amor.
• Mitología Eslava
Aquí tenemos a Baba Slata (también llamada Zlata Baba, Slotaia Baba, Zolotaya Baba, Zolotaja Baba, Zolstoia Baba, Baba Zlatna, Baba Korizma, Baba Gvozdenzuba) puede traducirse como "Bruja Dorada" o "Anciana Dorada". Ella es venerada entre las poblaciones ugrofinesas a lo largo del río Ob, pero también entre los eslavos. Ella tiene otros dos aspectos, Baba Korizma ("Cuaresma vieja") y Baba Gvozdenzuba ("Vieja dama de dientes de hierro"). Su paralelismo es Hekate.
Entre los pueblos indígenas del Noreste de Europa / Noroeste de Siberia, Baba Slata es un ídolo legendario, un presunto elemento de adoración, se dice que "Slata Baba o la bruja dorada", un ídolo en forma de anciana que sirve como un oráculo para los sacerdotes indígenas, y que cerca de la desembocadura del río Ob, hay una roca de forma que se asemeja a una mujer harapienta que lleva un niño en sus manos, y los Samoyeds Obdorianos la usan en su hechicería pagana .
Como vimos en su nombre, tiene una fuerte relación con Güllveig ("rama de oro" o "brillante"). En esta mitología también tenemos una contraparte para Freya, llamada Kostroma diosa de la fertilidad eslava oriental . Su nombre se deriva de костёр (kostyor), la palabra rusa para "hoguera". Ella también tiene un hermano gemelo llamado Kupalo quien al igual que Frey era dios del sol, y representaba el sol del solsticio.
• Mitología Sami
En esta mitología tenemos a Mattarahkka: diosa de la tierra madre de las hijas Sarahkka, Juksahkka y Uksahkka. Ella recibía almas enviadas a la encarnación por el dios Radien (el dios principal, el gran creador del mundo). Sus hijas a veces son una trinidad de la misma Diosa, pareciéndose así a Hécate, conocida por ser la diosa triple, quien también se la llama con epíteto Ctonia (Χθονια, ʻde la tierraʼ), incluso se la llamaba madre de los dioses.
Otra diosa (hija de Mattarahkka) llamada Sarahkka, se la conoce como La diosa de la fertilidad, la menstruación, el amor, la sexualidad, el embarazo y el parto. Saaraahka fue el dios femenino más importante y su paralelismo era Freya.
Como hemos visto, Heidr fue una diosa poco mencionada, o al menos tácitamente en textos y aunque pareció que no tuvo relevancia, hoy sabemos que fue una parte muy importante dentro de la mitología, y su culto, aunque apagado, no ha muerto, pues hoy en día más gente está conociéndola (yo estoy tratando de aportar un poco a eso). Ella nos enseña sabiduría, su luz brillante ilumina el caldero de donde podemos tomar un poco de su magia a través de Seidr.
Con este texto espero hacer su mismo trabajo y llenar un poco con conocimiento a las brujas que intentamos traer a esta era la tradición de las völur del norte.
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